miércoles, 6 de febrero de 2013

PEPIN VINAGRETA

PEPÍN VINAGRETA
Por Jorge C. Oliva Espinosa

Hoy decidí convertir esta crónica en una entrevista y tomar el papel
de entrevistador. Resulta que en mi cuadra vive un personaje muy
instruido e interesante. Es un viejo que sobresale entre mis vecinos,
donde el nivel de escolaridad es más bien bajo, porque fue ingeniero
eléctrico en la antigua Compañía de Electricidad y, debido a ello,
todos lo consideran un hombre culto. Igualmente, tiene fama de
amargado y reaccionario. Se la ha ganado por sus permanentes diatribas
contra el gobierno y por los exabruptos de respuesta que, como chorros
de ácido, emite como si se sintiera agredido. Él reacciona así ante
cualquier comentario que se haga en su presencia y por cualquier
noticia que traiga el periódico, porque no está conforme con nada y
siempre se siente aludido o afectado. Le dicen "Pepín Vinagreta" y
vive así, amargado, como en permanente guardia defensiva. Cuando
escuché varias de sus tempestuosas descargas, me interesé por conocer
sus motivaciones y me le acerqué con cautela y con respeto. Yo quería
saber si estaba ante alguien necesitado de protagonismo, si ante un
caso de manía obsesiva de carácter senil o, sencillamente, se trataba
de un reaccionario empedernido. No fue tarea fácil, lograr que me
expusiera con serenidad sus argumentos. Después de meses de tratarlo
con ecuanimidad y condescendencia, he aquí algunas de sus respuestas:
Comencé interesándome por su familia. Pepín es viudo y tiene tres
hijos. Uno, el mayor, era ingeniero eléctrico, como él, pero se cansó
de "trabajar por una miseria" y se fue en una balsa para el Norte.
Aquí le quedan una hija médico y un hijo arquitecto. Le hago notar que
todos, gracias a la Revolución, alcanzaron un título universitario.
Pero, –me dice- ¿de qué les ha valido? A Rosita le dieron un
consultorio de la familia, que por poco acaba con ella; no tenía
descanso y con la llenadera de papeles casi me la vuelven loca. Pidió
la baja, le invalidaron el título y ahora, en vez de cuidarme a mí,
cuida a los padres de gente que le pagan en fulas. Al varón, por un
tilín lo enmarañan con el cemento que se robaban en las obras, desde
los albañiles hasta los jefes, y tuvo que salir de aquella empresa a
millón, porque la cosa estaba que daba asco y mi muchacho no entraba
en eso. Luego fue a parar a una Dirección Municipal de la Vivienda,
donde lo nombraron "Arquitecto de la Familia". Allí se encontró con el
mismo panorama de corrupción y robadera y, como todo el mundo se
tocaba, terminó cobrando por hacerle planos a los que lo necesitaran.
Ninguno de mis hijos podía vivir con el salario que recibía por
ejercer su profesión. Entonces, yo me pregunto: ¿De qué les valieron
los estudios?
El rosario de temas que abordamos fue extenso; en todos, Pepín se
mostró como un crítico acérrimo de lo dispuesto por cualquier
autoridad. Y por ser acontecimiento reciente, llegamos a las
elecciones efectuadas el domingo pasado. Como hizo en las anteriores,
él no acudió a votar en estas. Le inquirí el porqué de su negativa a
ejercer un derecho. He aquí su respuesta, ácida como el vitriolo, pero
argumentada racionalmente según su criterio:
_ No voto, porque no importa que se elija a uno o a otro, siempre
gobernará el Partido que está por encima del "estado y la sociedad".
Así lo dice el artículo 5 de la Constitución. Además, En cualquier
otro país, un tribunal electoral proclama a los candidatos electos.
AQUÍ NO HAY NECESIDAD DE ANUNCIAR LOS VENCEDORES. Todos los postulados
resultan electos.
Dejo a Pepín Vinagreta por incorregible, revolcándose en su amargura.
No me queda duda que el problema de sus hijos le ha afectado. Pero,
aun con sus años, lo veo todavía lúcido y al parecer no requiere
tratamiento psiquiátrico. Aunque su mal es incurable, como a muchos,
algunos cambios le ayudarían a sentirse mejor.

Desde Regla,
Ayer "La Sierra Chiquita"; ayer, hoy y siempre, bastión de rebelde cubanía
Febrero 6 de 2013


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De la Revolución iniciada en 1868 y aún inconclusa, soy hijo; a ella me
debo.

Jorge C. Oliva Espinosa. Cubano, nieto de mambises, sobreviviente.
http://jorgecolivaespinosa.blogspot.com.es
jorgecoliva@gmail.com

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